Esta semana he tenido (y voy a tener, que aún estamos a viernes) toda la actividad social que no he tenido en medio año. Voy tan a lo loco que me he puesto a hacer por inspiración de a saber qué jocoso dios de la montaña una serie de artes conceptuales sobre, en principio, vestimentas típicas de las buenas gentes que pueblan ese mundo que tengo por ahí escondido. Y que espero que más pronto que tarde vea definitivamente la luz.
Mientras tanto, aquí van los tres primeros. Un mercader rico (que de hecho es el tipo y modelo del Rey de los Mercaderes), un mercader medio y una campesina random, todos salidos de la impenetrable fortaleza de Corabias.
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